jueves, 7 de marzo de 2013
Trece años
Me acuerdo que corría el año de 1999 y una pequeña bolita de pelo nació el 29 de julio, fue regalada a una niña que recién acababa de cumplir 10 años el 2 de agosto.
Me acuerdo que su madrina llegó en el auto, su prima se bajó, le entregó la bolita de pelo y huyeron, ella la sostuvo entre sus manos y era tan pero tan pero tan pero taaaan pequeñita que le sobraba mano para sostenerla.
Me acuerdo que esa bolita de pelo era un cachorrito, sus dueños habían tenido un debate ya que no sabían que nombre ponerle, unos decían que Benji, otros que Patch Adams, luego la madre de la niña dijo: "Mox."
Me acuerdo que fue el nombre perfecto, esto debido a que hacía poco que habían visto una película llamada "The Varsity Blues" y el protagonista se llama Jonathan Moxon, de ahí el nombre.
Me acuerdo que la niña tiene un hermano mayor, así que cuando regresó de donde andaba, entre la mamá, el hermano y ella bañaron a Mox en la lavandería, pobrecito no sé cómo no se resfrió, sin lugar a dudas desde pequeño mostró todo su valor.
Me acuerdo que Mox duró llorando durante tres días en las noches ya que extrañaba a sus hermanitas y a sus papás, así que la niña le regaló su mejor osito de peluche llamado Bubu, pero ni así logró que dejara de llorar.
Me acuerdo que su mamá decidió meter a Mox en una cajita y dejó su mano en la cajita para que ya no tuviera miedo; funcionó.
Me acuerdo que una ocasión Mox le llevó su cazuelita de la comida a la niña para que le sirviera croquetas; nunca nadie lo vio hacerlo de nuevo.
Me acuerdo que Mox tenía complejo de Napoleón, ya que era un perrito pequeño y le ladraba a los más grandes.
Me acuerdo que Mox tenía ladrido de perro grande.
Me acuerdo que se asomaba por la parte de abajo de la puerta del patio para poder ver cuando la familia partía en el carro.
Me acuerdo que cuando regresaban él lloraba como si lo estuvieran "matando" porque estaba ansioso por verlos.
Me acuerdo que la niña y su hermano jugaba con él a las escondidas; el niño salía corriendo, la niña le tapaba los ojos a Mox, el niño se escondía y luego la niña le destapaba los ojos y él salía corriendo por toda la casa hasta encontrarlo.
Me acuerdo que la niña se sentaba a Mox en las piernas y se quedaba dormido.
Me acuerdo que la niña le enseñó a subirse a las camas, primero con un banquito y cuando creció pudo hacerlo él solito.
Me acuerdo que cuando estaba en el patio comenzaba a temblar para que lo dejaran entrar; no importaba que estuviera a 35° centrígrados allá afuera.
Me acuerdo que en una ocasión en que la familia de la niña fue a El Paso, Texas, le compraron más cosas a Mox que a ella y a su hermano; entre esas cosas fue una camita.
Me acuerdo que muy pocas veces durmió en la camita, le gustaba jugar con ella al grado que la destrozó.
Me acuerdo que intentaron tirarla a la basura pero él iba y la sacaba del bote porque era SU camita.
Me acuerdo que viajó muchas veces a Juárez.
Me acuerdo que cuando fueron a col. Ocampo y lo dejaron en el corral correteó a las vacas y a las gallinas.
Me acuerdo que la primera vez que viajó a Juárez, la niña se bajó en Villa Ahumada para llevarlo al baño, unos perros más grandes que él lo comenzaron a morder y la niña no pudo hacer algo al respecto porque se quedó shockeada, hasta que llegó su mamá y logró quitárselos.
Me acuerdo que nadie habló de regreso a casa porque a todos les dolía que estuviera malito.
Me acuerdo que en una ocasión lo dejaron al cuidado de uno de los tíos de la niña y los nietos de este quisieron bañarlo, los muy hijos de p.... no lo secaron bien así que se enfermó :C
Me acuerdo que siempre que veía la puerta abierta salía corriendo como si no hubiera un mañana.
Me acuerdo que cuando estaba enfermo y veía la puerta abierta sólo se quedaba viéndola y no hacía nada.
Me acuerdo que en una ocasión se salió, unos vecinos lo agarraron y lo metieron en su patio.
Me acuerdo que toda la familia de la niña salió a buscarlo y no lo encontraban, hasta que la niña escuchó el collar de Mox y le dijo a sus papás donde estaban; gracias a Dios lo devolvieron.
Me acuerdo que siempre que la niña estaba triste Mox iba y le hacía compañía.
Me acuerdo que en los inviernos fríos Mox se iba al cuarto de la niña y le calentaba los pies al acostarse encima de ellos.
Me acuerdo que cuando escuchaba el carro o la camioneta se subía al sillón y se asomaba por la ventana.
Me acuerdo que el hermano de la niña lo aventaba desde el peinador a la cama de él y Mox movía su colita.
Me acuerdo que todos los días movía su colita.
Me acuerdo que cuando lo terminaban de bañar se subía a los sillones y corría como loco por lo feliz que estaba.
Me acuerdo que siempre se quería meter a la bañera, pero cuando le tocaba baño salía al patio.
Me acuerdo que veía sus toallas, las mordía y no dejaba que nadie se le acercara.
Me acuerdo que cuando estaba cerrada la puerta de cualquier cuarto la rasguñaba hasta que le abrieran.
Me acuerdo que ayudó a que la niña no cometiera una tontería con su brazo y un cuchillo.
Me acuerdo que cuando la niña llegaba a la casa oliendo a perro de otro hogar no le hacía caso porque se ponía celoso.
Me acuerdo que un 31 de diciembre, un tipo intentó entrar a la casa, pero como Mox ladró, y ya que tiene ladrido de perro grande, asustó el tipo y salió huyendo.
Me acuerdo que siempre le gruñía a Maribel, la ex novia del hermano de la niña
Me acuerdo que al ex novio de la niña pocas veces le ladró.
Me acuerdo que también le gruñía a Kevin, Alex y Arnoldo; amigos del hermano de la niña.
Me acuerdo que le encantaba subir y bajar las escaleras de la casa de la hermana del papá de la niña.
Me acuerdo como jamás aprendió a traer la pelota, pero le fascinaba ir detrás de ella.
Me acuerdo que aullaba cuando escuchaba el sonido de la flauta.
Me acuerdo que muchas veces se salió de la casa sin que su familia se diera cuenta, regresaba, rasguñaba la puerta principal y todos se aliviaban al saber que estaba de nuevo en casa.
Me acuerdo que cuando estaba chiquito le gustaba morder las cosas; le destrozó unos huaraches a la mamá de la niña.
Me acuerdo que una vez quiso bajar las sábanas del tendedero y la mamá de la niña le dio un pequeño golpe con la escoba y jamás intentó volver a bajar las sábanas.
Me acuerdo cuando se puso celoso del gatito que llevó la niña.
Me acuerdo que al final terminaron jugando y queriéndose mucho; el gatito y él.
Me acuerdo que cuando el gatito se fue al cielo de los gatitos él lo extrañó mucho y lo buscaba por el patio.
Me acuerdo que la niña sufrió mucho cuando se dio cuenta que de un mes para otro se puso tan malito que dejo de ver, escuchar, olfatear y caminar.
Me acuerdo cómo lloró la niña cuando la familia decidió que acompañara al gatito a dormir.
Me acuerdo que Mox vivió trece hermosos y maravillosos años al lado de la niña.
Me acuerdo que hoy Mox se durmió plácidamente.
Me acuerdo que la niña siempre amará y extrañará a Mox.
Me acuerdo que esa niña no ha dejado de llorar en todo el día de hoy.
Me acuerdo de muchísimos más recuerdos entre la niña y Mox pero ella ha decidido dejarlos en su corazón para mantenerlos más puros.
Me acuerdo que esa niña soy yo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)